Mateo Yovany, nació en Tlapa de Comonfort, Guerrero, llegó a Sonora junto con sus padres, Juan y Martha, originarios de Oaxaca, en busca de mejores oportunidades, sin contar con su acta de nacimiento, y sin acceso a sus derechos básicos.
Juan de 39 años y Martha de 25 años se dedican a vender dulces en las playas de San Carlos, para sacar adelante a sus hijos y ayudarlos a conseguir sus sueños, sin embargo, durante 7 años no habían podido acceder al trámite por falta de recursos y con ello brindar servicios de salud y acceso a la escuela a Mateo.
A través del trabajo coordinado con la sociedad civil, la Fiscalía de Sonora y Grupo Koval, por medio del “Proyecto Buenos Vecinos”, se logró un convenio de colaboración entre el Registro Civil de Guerrero y de Sonora para que el pequeño Mateo obtuviera su identidad y acceso a sus derechos.
La Fiscalía de Sonora, por medio del Centro de Justicia para las Mujeres, reiteró su compromiso de buscar las condiciones adecuadas para el empoderamiento de las mujeres y sus familias, sin necesidad de que hayan estado expuestas a algún entorno de violencia.