A causa de los problemas económicos y la crisis sanitaria que vivió el país, el número de personas en estado de vulnerabilidad ha aumentado y el Banco de Alimentos de Mazatlán ha tenido dificultad para solventar esta demanda.
Dora Zatarain, auxiliar de dirección y comunicación del Banco de Alimentos de Mazatlán, señaló que desde el 2020, el número de insumos no es suficiente para la cantidad de solicitudes que se reciben semanalmente, ya que todos los jueves son aproximadamente 50 solicitudes de apoyo, las cuales en ocasiones no es posible cubrir.
Añadió que casi la mitad de las empresas que antes de la pandemia apoyaban al Banco Alimentos, actualmente ya no lo están haciendo.
El Banco de alimentos atiende a 9,500 familias en el sur del Sinaloa, y esperan que las donaciones se incrementen para apoyar a más personas en situación de pobreza.
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