Por desacato a una orden del poder judicial de la federación se habla de la destitución del tesorero municipal Javier Alarcón Lizárraga con relación a un adeudo de administraciones anteriores donde se le obliga al ayuntamiento a pagar a un particular la cantidad de más de 37 millones de pesos por un predio particular que fue invadido.
El presidente municipal Luis Guillermo Benítez Torres asegura que la situación del tesorero municipal deberá definirse por medio de las instancias jurídicas y que el adeudo es de alrededor de 35 millones de pesos y que tiene que ver con una calle.
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