La crisis sanitaria
que asola al mundo, desembocará en una recesión económica no vista desde hace
más de un siglo, según apuntan todos los expertos. Las consecuencias que
vendrán en los años sucesivos son de difícil previsión, lo que sí es notorio es
que serán negativas, aunque no se sabe en que grado afectará a cada actividad
económica.
Latinoamérica ha
visto como la pandemia ha tardado más en llegar que en otros lugares, pero
finalmente ha arribado, como era predecible. La intensidad con la que ha
incidido en cada nación es diferente, y en el caso de México aun está por ver
como evolucionará esta pesadilla. Aunque los contagios y los fallecimientos
suben día tras día.
El caso del sector
de las apuestas no es ajeno
tampoco a esta crisis, en el país azteca. Los cerca de 385 establecimientos
físicos que se dedican a este ámbito en todo el país, ven con cierta
preocupación el futuro, aunque se estima que solo un 4% de todas ellas, se
encuentren en riesgo de no volver a abrir la persiana tras esta pandemia.
Todos estos
agentes, fijan sus ojos en el gobierno federal. La vuelta al trabajo no será
fácil, ni para esta ni para el resto de actividades, por lo que las ayudas en
forma de apoyos y exenciones fiscales deben ser una realidad en el corto plazo.
Las medidas a acometer por estos locales de apuestas físicos, deben ser
estrictas. La desinfección tras su uso de máquinas, la distancia de seguridad
entre sus clientes y el control estricto de aforo, son los tres pilares
fundamentales que deben acometerse por estos agentes.
Toda esta pandemia,
no ha hecho más que incidir en las opciones que han traído las nuevas
tecnologías a millones de ciudadanos. Permitiendo que muchas actividades las
puedan hacer sin contacto con nadie, desde su propia casa, como por ejemplo
todo el ámbito del juego de azar. Por ello, casino online México se
ha convertido en la alternativa a los métodos tradicionales de desarrollar este
tipo de ocio, ganando cada día miles de adeptos, que se suman a esta nueva
comodidad de realizar su actividad preferida.
La parcela
interactiva de apuestas parece estar más que asegurada en el medio plazo. En
cambio, la parte física que comprende a todos estos establecimientos, deben
acometer medidas drásticas que les permitan cumplir con la legislación vigente,
y salvaguardar la salubridad de todos sus clientes.
La Asociación de la Industria del
Entretenimiento y Juego de Apuesta (AIEJA) comparte también su preocupación,
aunque ve como el Gobierno está tomando medidas para la vuelta a la actividad.
En palabras de su presidente, Miguel Ángel Ochoa, “los gobiernos de los estados,
me sorprenden por la respuesta en materia de dar facilidades para el pago de
impuestos. En Puebla, por ejemplo, no se cobrará el 10% del impuesto a los
jugadores, estamos esperando la respuesta de la Federación que hasta ahora no
se ha dado ninguna”.
El futuro es
incierto. El sector de las apuestas puede ser uno de los que menos sufra las
consecuencias de esta pandemia, debido a la gran implantación de muchas
plataformas online dedicadas a esta actividad.