Se trata de Laura Carmine quien durante una entrevista confesó que no quiere ser sexy.
La actriz confesó que ser una mujer sexy la hace sentir incómoda, debido a que todos sus papeles los ha logrado gracias a su espectacular figura, además de siempre tener la etiqueta de "mujer sexy", cosa que ella hoy rechaza completamente.
Además expresó que si hay algo que odia de su cuerpo, son sus glúteos, mencionó que ella entiende perfectamente que a toda mujer le gustaría tener mucho trasero pero para ella, es todo lo contrario.
Siguió confesando que su físico la hace ver mayor y que eso también la limitado a realizar diferentes personajes y que a veces, solo la ubican como "la sexy", aunque ella se considere una mujer "normal".
"Es horrible que te estereotipen en algo así, cuando en mi país ser nalgona y caderona es normal”, expresó la actriz.
Durante la entrevista agregó que no descarta la posibilidad de someterse a una cirugía para la reducción de glúteos pero también aseguró que eso se dará en su momento.
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