El Carnaval es la fiesta máxima de Mazatlán, cada año los mazatlecos ponen una cara alegre ante cualquier problema y se dedican a divertirse y gozar de la celebración, pero para lograrlo hay que decir adiós primero a la penas y qué mejor forma de hacer que con la tradicional “Quema del Mal Humor”.
Esta tradición no es exclusiva del puerto, sino que es común en otros carnavales del País, como el de Veracruz, o el de Campeche donde se “entierra al mal humor”; sin embargo para los mazatlecos su origen es bastante significativo, pues se remonta a una época de gran tragedia en el puerto.
De acuerdo con el cronista Enrique Vega, la tradición inició como tal en 1904 cuando se decide por primera vez hacer la quema de una figura, en ese entonces representando a la peste bubónica, enfermedad que azotó el puerto entre 1902 y 1903 y que de hecho impidió la celebración de la máxima fiesta en 1903.
“Para limpiar las malas vibras que había en la ciudad tras la muerte de tantas personas, quemaron de manera representativa a la peste para que el Carnaval siguiera celebrándose como hasta 1902”, explicó Vega, también director de planeación del Instituto de Cultura, Turismo y Arte de Mazatlán.
Si bien la tradición tal y como la conocemos surge con la intención de dejar atrás los malos momentos que se vivieron por la peste, su celebración vino a llenar el vacío que dejó el cambio de poder en torno a la corte real, pues anteriormente era el rey y no la reina la máxima figura de la fiesta y éste tenía dentro de sus obligaciones el recitar un discurso satírico humorístico ante sus súbditos.
“Originalmente se elegía al rey por su facilidad de palabra y su capacidad de oratoria”, comentó Vega, quien este año cumplirá 18 años como cronista del puerto.
“Los discursos que él daba solían ser satíricos, sobre situaciones irónicas que involucraban a la autoridad y la vida del puerto y se realizaba como una forma de divertirse y desahogarse”.
Sin embargo, la llegada de la primera reina Wilfrida Fármer, en 1900, la figura del rey toma un segundo plano para después quedar relegada detrás de la reina de los Juegos Florales y la reina infantil, y con ella se pierde la tradición original.
“Cuando ya el rey empieza aparecer como una figura decorativa al lado de una reina, se deja de hacer este tipo de intervenciones, se empieza a cuidar más la imagen y el lenguaje, y es entonces cuando la quema del mal humor se convierte en ese espacio en el cual se desahoga esa parte irónica y ácida del carnaval”, comentó.
Desde entonces es el grupo conocido como “Los Bolcheviques”, en honor al grupo político dirigido ruso que dirigía Vladimir Lenin, se encarga de organizar dicho evento y de seleccionar al personaje o elemento, cuyo monigote será llevado a la hoguera en representación de todos los malestares que podrían empañar la alegría de la fiesta.
Antes de dar inicio a la quema, y en alusión a la tradición realizada anteriormente por el rey, se lee la proclama que indica con gran humor y sarcasmo el motivo por el cual se ha seleccionado dicha figura.
La selección varía de acuerdo con el contexto político, económico y social que se vive cada año, por ejemplo durante la Segunda Guerra Mundial, la figura de Hitler fue la elegida; mientras que el año pasado se “achicharró” al Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, debido a su estricta política migratoria en contra de la comunidad latina.
Otros personajes políticos que han pasado por la hoguera han sido el ex Alcalde de Iguala, José Luis Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda, acusados de ser los presuntos autores intelectuales de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero; incluso en el 2011 se quemó una figura de apodo “Bell”, que hacia referencia al ex presidente municipal del puerto Jorge Abel López Sánchez.
Pero no siempre se elige a un personaje político, por la hoguera han pasado celebridades como Lucero y el payaso Platanito, equipos de béisbol, la Comisión Federal de Electricidad, el peso mexicano, y al muro de Trump, entre otros.
Originalmente el cortejo, conformado por el comité organizador con antorchas en las manos y seguido por el pueblo, recorre la calle Aquiles Serdán y la Av. Miguel Alemán para llegar a Olas Altas y situarse en el monumento conocido como El Venadito; sin embargo este año el recorrido y la quema se llevarán a cabo entre dicho monumento y la Casa del Marino, donde también se llevará a cabo el Combate Naval.
Notas de interés: